
Sesión de mañana. Aun con la energía del día anterior latente en las venas nos presentamos de nuevo en el Auditorio de la Facultad de Ciencias para escuchar las ponencias de Surco, Sensaa, PKMN (Pac-man) y Basurama.
Surco es un estudio afincado en Sevilla aunque no por ello trabajan en exclusiva allí. Se dedican a trabajar, con bastante acierto, allí donde otros no se atreverían: re-activando los espacios olvidados por el sistema, como la zona norte de Granada o el área denominada "Las 3.000 viviendas" en Sevilla (lo siento, no he logrado retener el nombre real del barrio). La clave de su éxito viene dada por la integración del colectivo receptor de la intervención en el proceso proyectivo. Por si no hubiera quedado claro en las jornadas anteriores su ponencia vino a corroborar que contando con el ciudadano se gana más que imponiéndole a la fuerza la idea que alguien ajeno conciba en la tranquilidad de su estudio. Así consiguen no sólo la aceptación de la intervención, sino además propiciar que los ciudadanos tomen como suya la propuesta consiguiendo el apego necesario para que éstos se encarguen del mantenimiento de la misma a lo largo de su vida útil.
Después vino Ángel, de Sensaa, quien nos estuvo mostrando los interesantes avances que ofrecen las técnicas de Realidad Aumentada y las aplicaciones que a la arquitectura podrían dársele de cara al tratamiento sobre el entorno urbano. Realmente las posibilidades se antojan infinitas y es más que probable que en un corto plazo de tiempo veamos un desarrollo tal que permita dar el salto definitivo a aplicaciones de manera permanente que hagan interactivos (aún más) aquellos entornos que no terminan de arrancar.
Por causas de fuerza mayor hube de ausentarme durante el descanso, perdiéndome con ello la charla de PKMN (pac-man), y es una lástima, porque encontrarme 200 personas con caretas de arquitectos sin saber por qué resulta ciertamente desconcertante. A buen seguro debió de ser una ponencia interesante.
Fuera de programa se animó a Basurama a exponer su labor y, dado el buen clima reinante, no pudieron negarse a compartir sus experiencias con todos: asistentes, ponentes y organizadores. Un trabajo muy interesante el del colectivo, que aunque se muevan más hacia el ámbito de las "performances" sus intervenciones de mínimos logran los mismos objetivos que las propuestas arquitectónicas tradicionales: reactivar y poner en valor espacios urbanos cuyo uso ha decaído con el tiempo.
Sesión de tarde. Y para cerrar las jornadas de Arquitaxi nada mejor que poner en común el trabajo realizado por los talleres: intervenciones de todo tipo destinadas a devolverle al ciudadano el gusto por usar su espacio público. Propuestas y actos de todo tipo en los que queda patente que el presupuesto nunca es una limitación, pues una simple cuerda o incluso ningún material bastan para implicar a la gente a disfrutar del entorno.
Tras las últimas palabras de agradecimiento una colosal actuación de Blete para amenizar la despedida entre ovaciones a los organizadores de tan magistral evento.
Como corolario del congreso podríamos decir que:
El único requisito que resulta necesario para reactivar espacios urbanos consiste en una actitud activa para observar y detectar sucesos y, en base a ellos, generar respuestas que, en la mayoría de los casos, no requieren mayor coste de preparación, tan solo una actitud vitalista, civismo y ganas de hacer cosas.
Desde aquí mi agradecimiento a los organizadores por otorgarnos 3 días sensacionales.